Vivir la vida no solo consiste en dormir y levantarse
cada día, también consiste en saber disfrutarla cada instante, cuidarla y
realizar todo lo que nos propongamos pero siempre para bien, la actitud es
importante para que tengas una vida plena.
1.- Deja de querer controlarlo todo
Si de verdad quieres ser feliz debes tratar de dejar
querer controlarlo todo. Conozco personas que quieren tener el control de todo
y, lo que hacen es amargarle la existencia a todo aquel le rodea y así mismo.
Deja de controlar a tu pareja, a tus hermanos, a tu madre, a tu padre, etc. No
es justo. Entiendo que lo que no quieres es que el otro fracase. Quizá sientes
que tienes la responsabilidad de velar para que no le suceda al otro lo que te
sucedió a ti, pero... entiende que algunas personas aprenden de su propia
experiencia, no de la de los demás. Da tu consejo y deja que el otro sea libre
de elegir lo que cree que más le conviene. Deja a los demás ser como son, verás
que serás feliz.
2.- Deja de cargar con la responsabilidad de los demás
Esto es muy importante, cada uno tiene que aportar su
grano de arena. He visto personas que cogen todo para ellos solos, y cargan con
todo el peso de la responsabilidad. Luego, las personas se hacen los locos y te
dejan todo a ti: en el trabajo, en la casa, en la universidad, en el colegio,
en la iglesia. Deja que cada quien aporte su parte, aunque esta sea pequeña. TU
NO TIENES que cargar con los compromisos del otro. Coopera, pero no cargues con
la responsabilidad ajena: tú debes ser feliz.
3.- No siempre tendrás la razón.
Sé que es difícil dar tu brazo a torcer. Es probable que
los demás no quieran o no están en la capacidad de entender tu punto de vista.
Pero... déjalo ir, no vale la pena imponerte y lastimar a los que te rodean. Es
una situación demasiado estresante, ¡déjalo ir!
4.- Discutir y violentarte quitará años a tu vida.
Si te enojas demasiado, cálmate y espera que las aguas
vuelvan a su curso. Si estás en lo correcto, Dios te dará la razón.
Tú mereces ser feliz.
¿Por qué te preocupa ser aceptado?
Para ser feliz, no finjas ser alguien que no eres sólo
para lograr ser aceptado. ¿Qué sucederá cuando te quites la máscara y todos
vean realmente cómo eres? No, debes ser tú mismo, eso es lo que te hace
especial. Le caerás bien a algunos, le caerás muy mal a otros: No te preocupes.
Jesús nuestro Señor pasó exactamente por lo mismo... Deja
que las personas te acepten tal y como eres, no te esfuerces y, por favor, para
ser feliz no debes pretender ser alguien que en verdad no eres.
5.- No te quejes tanto
"Al mal tiempo, buena cara", no sé quién lo
dijo, pero de seguro que era bien sabio. Al ser humano les ocurren cosas malas
todo el tiempo. Es aceptable que te quejes y sufras lo que te acontece, pero lo
que no está bien es que vivas quejándote hasta de la más mínima cosa. No es
fácil vivir con alguien que vive quejándose todo el tiempo de pequeñeces,
cuando hay tanta gente sufriendo por cosas mayores. Cuando sientas la necesidad
de quejarte, mira a tu alrededor, de seguro verás gente con problemas el triple
de pesados que el tuyo y, quizá, hasta los veas felices.
6.- Deja de dar tantas excusas
Para ser feliz no las necesitas !suéltalas! Las excusas
te limitan, te estancan y no te dejan vivir tu vida al máximo. Hoy vas a decir:
Yo puedo, yo quiero y voy a salir adelante. Voy a terminar ese proyecto tan
importante para mí y para mi familia y no lo voy a postergar más y, con la
ayuda de Dios saldré a camino y seré feliz.
7.- Deja de criticar
No somos iguales, si fuera lo contrario, ¿este mundo
sería sumamente aburrido? Pero... Sí, existe algo que compartimos todos: el
deseo de ser felices.
Deja al otro vivir su vida para que puedas tener tiempo
de vivir la tuya.
Jesús dijo a sus discípulos: "No juzguen y no serán
juzgados; no condenen y no serán condenados; perdonen y serán perdonados”.
¿Y por qué miras la paja que está en el ojo de tu
hermano, y no ves la viga que está en el tuyo? ¿Cómo puedes decir a tu hermano:
"Déjame sacar la paja de tu ojo", tú, que no ves la viga que tienes
en el tuyo? ¡Hipócrita! Saca primero la viga de tu ojo, y entonces verás claro
para sacar la paja del ojo de tu hermano".
Si vas a criticar hazlo adoptando una actitud
responsable, no dañina, sino más bien constructiva y llena de amor. Debes
primero conocerte y también comprender al otro. La crítica dañina agrandará las
diferencias entre tú y tu prójimo, ¡te impedirá ser feliz!
8.- No te resistas a los cambios.
Los cambios son buenos. Nos ayudan a permanecer en
movimiento. Los cambios mejoran nuestra vida y la de los demás. Dios sabe por
qué pasan las cosas. ¿No te ha pasado que te cambian algo de repente y luego
las cosas te salen mejor? Sé feliz y acepta el cambio... No te resistas, sigue
la corriente.
Señor, haz conmigo lo que quieras, porque sé que siempre
haces lo que consideras mejor para mí.
9.- Deja ir el pasado
Para ser feliz es necesario que dejes ir el pasado, no es
nada fácil. Sobre todo si nuestro pasado fue mejor que nuestro presente. Pero,
debes reconocer que el pasado ya pasó y solo te queda vivir el presente. Ten en
cuenta que ahora en el presente puedes realizar cosas que te enorgullezcan y te
hagan aceptar y ver tu pasado de forma positiva. No te quedes en el ayer
lamentándote. Vive el presente y no pienses que tu futuro será aterrador. ¡Es
ahora o nunca!
10.- No te apegues a nada
El hecho de que no seas apegado a una cosa, no quiere
decir que no lo aprecias o no lo ames. Cuando sientes apego a alguna cosa
quiere decir que tienes miedo de perderle. Nada es para siempre, lo que si es
para siempre es el amor infinito de nuestro Padre Celestial. El amor y el miedo
no coexisten, debes romper este lazo para que llegues a ser una persona:
tolerante, pacifica, amable, empático, amorosa. Es algo difícil de explicar,
pero te conviertes en alguien que acepta con amor todo lo que le acontece.
Esperamos que estos consejos te ayuden a ser feliz, de
una buena vez y para siempre.