Señor mi DIOS dame la tranquilidad de las montañas para estar en conexión positiva con los míos, dame la tranquilidad de las aguas para fluir en paz con mis semejantes, mis hermanos, mis vecinos, dame la fortaleza de una roca para ser fuerte ante cualquier situación y dame una base inquebrantable para que ninguna tempestad me derribe.
Confiado estoy en ti, y sé que jamás abandonarías a tus hijos, hijos que en efecto cometemos errores, pero siempre con una gran experiencia que nos deja vivir y nos enseña.
Puesto que tu presencia también esta en la experiencia, experiencias que no debemos repetir y que de alguna manera deberos como tomar como base para vivir una vida plena y llena de bendiciones.
Dios, concédeme la serenidad para aceptar las cosas que no puedo cambiar, el valor para cambiar las cosas que puedo cambiar y la sabiduría para conocer la diferencia; viviendo un día a la vez, disfrutando un momento a la vez, valorando todo lo que has puesto para mí, como la luz del sol, el aire al respirar, la buena familia que tengo y amigos verdaderos.
Aceptando las adversidades como un camino hacia la paz; pidiendo, como lo hizo Dios, en este mundo pecador tal y como es, y no como me gustaría que fuera; creyendo que Tú harás que todas las cosas estén bien si yo me entrego a Tu voluntad.
De modo que pueda ser razonablemente feliz en esta vida e increíblemente feliz Contigo en la siguiente.
Gracias entonces te doy Señor por escuchar esta Oración que con el corazón en la mano ofrezco, y que con plena confianza se que me concederás en tu gran misericordia.
Amen
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